Una pareja de recién casados, Mareli y Ryan Draenery, estaban de luna de miel en Sudáfrica. La tragedia ocurrió cuando los cónyuges intentaron tomar una hermosa fotografía en la costa.
Los recién casados llevaron consigo una lista de fotografías que debían tomar durante el viaje. Una de ellas tenía que ser tomada contra el telón de fondo de una gran ola oceánica.
La idea resultó en un accidente.
La familia posaba en una de las costas rocosas y esperaba la ola alta. Lograron la toma, pero un instante después, la ola arrojó a los recién casados de la roca a las piedras.
Como resultado, la mujer sufrió una fractura en la pierna en dos lugares. Ya ha sido sometida a una operación donde le colocaron una placa de titanio y 12 tornillos.
Pasó dos días de sus vacaciones en el hospital, pero planea continuar su viaje a pesar de la lesión.